Este lunes ha empezado en el sur de Florida el periplo judicial de Alex Saab, el gran operador de negocios del chavismo de los últimos años y el presunto testaferro del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. El chavismo contiene la respiración ante uno de sus episodios más difíciles. El Gobierno trató por todos los medios de impedir que el empresario colombiano, conocedor de primera mano del entramado financiero del Ejecutivo, pusiera un pie en Estados Unidos. No lo logró. Saab voló desde Cabo Verde hasta Miami este sábado después de 16 meses detenido en el país africano. La extradición da comienzo ahora a un proceso judicial de final incierto. La colaboración o no del empresario será clave para ver si la investigación llega hasta el mismo Palacio de Miraflores.