De acuerdo con reportes que nos han pasado nuestros colaboradores y los responsables del INAH, al parecer, ya son más de 20 perros que deambulan por la zona arqueológica de Chichén Itzá, lo cual, de no atenderse a tiempo, podría convertirse en un problema de salud pública, declaró el director del Patronato de las Unidades de Servicios Culturales y Turísticos del Estado de Yucatán (Cultur) Mauricio Díaz Montalvo.
Incluso como se ha publicado en redes sociales, algunos canes andan por las escalinatas de la pirámide de Kukulkán, lo que también implica un riesgo para la propia infraestructura milenaria del Castillo.
Por tal motivo, hoy Mauricio Díaz se reunió con Azalía May Ceballos, Natalia Upring y Lourdes Durán, representantes de las asociaciones Cinco Patas, Adopta y Perrópolis, respectivamente, a fin de hallar una solución con triple objetivo: cuidar a las personas, proteger la zona arqueológica, y dar un mejor ambiente y vida más digna a los perros.
«Vamos a llamar a esta tarea como ’Operación rescate de los perritos de Kukulkán’», propusieron las visitantes.
Las representantes de las agrupaciones agradecieron al director general de Cultur el hecho que se haya preocupado por los animales, ya que por lo general, se busca la salida más fácil de exterminarlos.
Durante la junta de hoy, Mauricio Díaz y las representantes de las asociaciones acordaron viajar el lunes a Chichén Itzá como primer paso, a fin de conocer la situación, el comportamiento de los animales, si están enfermos o requieren de alguna atención urgente, entre otras cosas.
«Se trata de un tema que no es asunto menor y lo vamos a atender con toda seriedad, buscando todas las alternativas para que juntos, sociedad y Gobierno, como nos lo ha pedido el Gobernador del Estado, Mauricio Vila Dosal, hallemos la mejor solución», expresó el funcionario.